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Entre escombros

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Torre de iglesia (Cholula, Puebla, México) dañada por el sismo del 19 de septiembre de 2017 Poesía En su insignificancia el ser humano se yergue enorme entre los escombros de lo impensable busca un aliento de vida al cual abrirle paso flor que rompe el concreto renacer entre manos desconocidas pero más cercanas y humanas que esas garras perfumadas remate de la manga de un traje caro y de marca que cubre la podredumbre de quienes dictan la miseria. De qué sirven tantas cabezas de la hidra si el cuerpo se basta a sí mismo potencia de lo humano que guía el paso danza y orquesta sin director más que el espíritu belicoso que ve ahora su utilidad el pelearle sin tregua a la naturaleza y a la muerte la vida la memoria y la experiencia irreemplazable de quien ha compartido también la abrumadora existencia este incansable sobrevivir entre la naturaleza lo humano. Entre escombros por Luis Fernando Cruz Carrillo se distribuye bajo una Licencia Cre

Sepultura de cenizas

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Ninfa que sueña la raza humana Poesía Toma tus cosas y vete no dejes nada para mí ni para el polvo ni siquiera los cabellos que se anudan bajo la cama. Levántate temprano antes del sol y de mis recuerdos para que tu ausencia sea luz violenta y la noche sea aún más terrible porque solo se sana después de que el dolor te dobla a cuchilladas y la boca dice haz que pare dios mío sin que el alma lo sienta porque es odio y soledad un animal herido que ruge bajo el peso de la furiosa luna es amor moribundo amor que muere amor muere descansa calla olvida. Toma tus cosas y ven escultura de cenizas hazme sufrir nuevamente vete de día regresa de noche una y otra vez que no sé estar a solas conmigo. Sepultura de cenizas por Luis Fernando Cruz Carrillo se distribuye bajo una Licencia Creative Commons Atribución-CompartirIgual 4.0 Internacional .

Riqueza del olvido

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Poesía La tarde Llega tarde Y se va pronto Me deja con un sentimiento oscuro Algo perdí y no lo encontraré. Briznas de azul cuelgan del cielo Cantos sin ave vuelan sin destino Nubes que se van lento y lejos Y se deshacen en llanto que fecunda La tierra que paciente espera Los cuerpos cansados de los existentes Que se anochecen en sueños del júbilo Perdido entre sus viajes a la realidad furica Con que construyen su sendero. Llega la noche Llega pronto Y se levanta temprano Ebria todavía de esperanza y destierro Y en su adiós una luz agitada y sórdida deja Faro que indica donde has de estrellar la nave Porque al olvido todos llegan con alas o sin piernas Pero llegan Y no es lo que olvidas el tesoro que robaste al mundo Sino lo que dejas en quien amas Tu verdadera riqueza Eso que sientes perdido Y que en ti no se encuentra. Riqueza del olvido por Luis Fernando Cruz Carrillo se distribuye bajo una Licencia Creative Com

Constancia de la podredumbre

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Parque de las ninfas, Puebla, México. Poesía Tenaz es la podredumbre tenaz y constante espera sin prisa ni pausa tranquila y violenta el sueño de la materia. Tenaz violenta toda construcción constante es su hambre ciega demoledora fértil hambre insuflada en lo humano que consume y erige sin cansancio. Constancia de la podredumbre por Luis Fernando Cruz Carrillo se distribuye bajo una Licencia Creative Commons Atribución-CompartirIgual 4.0 Internacional .

Máquina de una máquina: poesía

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Máquina de una máquina Poesía Máquina de una máquina que la anima y mueve. Cuándo nos hicimos semejantes, cuándo te hiciste más valiosa. El hombre va y viene, vaivén furioso, ansia de tiempo, ansiedad de un ser que no se es, insecto vestido de espejos que no reflejan más que una ilusión, un deber ser dado, aceptado sin el coraje con el que un perro defiende a su amo. Pero la máquina vale más, más que la vida, la muerte: tiempo sin retorno, latidos abandonados, manos que dejaron sus caricias en la piel insensible de la cosa. La máquina vale el corazón de la tierra, y la sepultura de todos los sueños vivos, vale como los minerales más que el salario de un obrero que renuncia a su existencia. La máquina, la cosa, el objeto, es un sacrificio silencioso sin redención ni gracia divina. La materia prima no es el mineral ni el plástico es el tiempo humano, su existencia dimitida por una promesa vana: felicidad hecha objeto. Máquina de la máquina por Luis Fernando Cruz Carrillo

Tirana señora

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Punta que se hiende entre pausa y pausa en el ánimo fétido, dolor de la alegría, alegría que sabe a regurgitado odio, a úlcera y puños apretados, dientes que crujen bajo el terrible peso de la envidia. Los he visto hacer de su sueño vestimenta cotidiana, y ponerse la gloria de sandalias o de abrigo… esa sonrisa flamígera hiere, irrita los ojos que ya solo ven entre las sombras de la tirana señora. Mirada podrida desde muy adentro, callada, palabras escupidas para adentro, silenciosas, sinceras felicitaciones como autobomba. Desear la envidia de otro, desear el aplauso, la fama, la admiración beata, limpia o demente. Irse muriendo de odio, de odio a sí mismo. Tirana señora por Luis Fernando Cruz Carrillo se distribuye bajo una Licencia Creative Commons Atribución-CompartirIgual 4.0 Internacional . Permisos que vayan más allá de lo cubierto por esta licencia pueden encontrarse en CC .